En enero, el gobierno paquistaní anunció que los cursos islámicos serían ahora opcionales para que los cristianos estudiaran la Biblia. Según el International Christian Concern, esta "pequeña victoria para la libertad religiosa en Pakistán" no oscurece los muchos desafíos que enfrenta el país.
El 22 de enero, el Ministerio Federal de Educación y Formación Profesional de Pakistán anunció la introducción de un nuevo plan de estudios para los escolares cristianos que les permitirá saltarse las clases islámicas y estudiar su propia religión a partir del comienzo del próximo año escolar.
El nuevo plan de estudios, dirigido a estudiantes desde la escuela primaria hasta la secundaria, proporcionará un estudio en profundidad de la Biblia, las enseñanzas sobre Jesús, la historia de la Iglesia y la influencia del cristianismo en Pakistán. También se estudiará la historia de héroes de la fe, como la de Shahbaz Bhatti, ministro federal de Pakistán para las Minorías, que fue asesinado en 2011 tras denunciar la causa de los cristianos perseguidos en el país.
La decisión del gobierno fue acogida con beneplácito por el presidente de la Asociación de Docentes de las Minorías de Pakistán, el profesor Anjum James Paul. Lo calificó como "una gran victoria para las minorías religiosas de Pakistán".
"Esta es una gran victoria para las minorías religiosas de Pakistán, ya que hemos estado luchando por una educación equitativa durante dos décadas. Después de apelar a varios gobiernos, instituciones y tribunales superiores, el gobierno pakistaní finalmente reconoció este derecho de los estudiantes de minorías y los eximió de estudiar el Islam como una obligación".
International Christian Concern, una organización que tiene como objetivo ayudar a las minorías religiosas de todo el mundo contra todas las formas de persecución, recuerda que a pesar de "cierto alivio", tomará tiempo para que "los maestros estén debidamente capacitados en el nuevo plan de estudios y para que se apruebe un libro de texto de estudios cristianos".
La organización dijo que todavía había "muchos desafíos" en el país de mayoría musulmana, donde los cristianos son "sometidos rutinariamente a las leyes de blasfemia, la violencia de las turbas, los matrimonios forzados y las conversiones".
De hecho, Pakistán ocupa el 7º lugar en el Índice Global de Persecución Cristiana 2024, establecido por Puertas Abiertas. Según la organización, la situación de los cristianos paquistaníes "se deterioró cuando Pakistán se convirtió oficialmente en un Estado musulmán en 1947". Los creyentes están en el punto de mira de la ley sobre la blasfemia "que puede conducir a la pena de muerte".
Fuente: Mélanie Boukorras. InfoChrétienne. Francia