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Colección de Estudios Bíblicos - Preparados por Alejandra Montamat.

El principio de nuestra historia. Génesis. Entrega 34.

Llegamos a un momento crucial en la vida de Jacob: deberá separarse de su tío-suegro con quién ha vivido 20 años. ¿Por qué no abandonó a su familiar abusador y avaro mucho antes? ¿La prosperidad de Jacob fue resultado de su madurez en la fe? ¿Por qué Labán prosperó tanto junto a Jacob? ¿Cómo usó Dios ese tiempo en la vida de Jacob? ¿Cuánto nos parecemos tú y yo en carácter y errores a este héroe bíblico? ¿De qué dos maneras hace Dios su obra en la vida de sus escogidos? Una lección que nos enseña cómo se relacionan la soberanía de Dios con nuestra propia disposición a ser moldeados en la fe.

JACOB Y LABÁN
Introducción

Hemos considerado que, aunque Dios ya había elegido a Jacob desde antes de su nacimiento para ser heredero de su abuelo Abraham, Él ha dispuesto trabajar en la vida de este patriarca a través de muchas pruebas con el fin de prepararlo para su labor. Una de ellas es la convivencia con un hombre astuto, codicioso, manipulador como su tío y suegro Labán.
Aunque Jacob todavía evidenciaba una fe débil e inmadura y trataba a toda costa de aventajar a su pariente utilizando sus artimañas y su gran capacidad de trabajo, tenía puesta su esperanza en las promesas dadas por Dios veinte años atrás en Betel. En este pasaje se nos detalla cómo cambia la relación de fuerzas entre estos hombres y cómo el Señor manifiesta su voluntad preparando las condiciones para que Jacob volviera a la tierra prometida.

La decisión 30:25-36
Jacob llegó a vivir con Labán en Padam-aram 20 años (Gn. 31:38). Durante los primeros 14 había trabajado para su suegro, manteniendo su compromiso a cambio de sus dos hijas (Gn 29:30). A continuación, otros seis años habrán de transcurrir antes de que Jacob finalmente decida abandonar la tierra de su pariente (31:41).
Durante este tiempo, once hijos y una hija conformaban la prole de Jacob, ya era hora de irse. Esta hacienda se había vuelto demasiado pequeña para Jacob y Labán. Seguramente Jacob añora ver nuevamente a su familia y esperaba recibir la bendición prometida de la tierra.

Una salida programada
Aunque hombre imperfecto, siempre mantuvo la fe en las promesas dadas por el Dios de Abraham 31:13.
Pero Jacob no podía simplemente empacar sus maletas e irse. La estructura de autoridad en la familia oriental era mucho más compleja y restrictiva, como lo es aún hoy en algunos lugares de esa cultura. Hubo una propiedad compartida, incluso por las esposas de Jacob y los niños, salir sin el permiso y la bendición del caudillo podría conducir a una guerra abierta dentro del clan familiar.

Una relación difícil
La mayoría de nosotros habría dejado la ciudad en una rabieta mucho tiempo antes que Jacob. Él perseveró durante 20 largos años. Hoy, es posible que experimentemos un ambiente de trabajo difícil. ¿Hemos pensado en orar para que el Señor nos de paciencia para soportar las circunstancias? Puesto que no podemos cambiar al jefe o los compañeros de trabajo, ¿por qué no orar para que el Señor los cambie? Este principio también se puede aplicar al matrimonio. Al optar por el camino fácil y salir de nuestro entorno de trabajo, de la relación matrimonial, o de la iglesia, nunca seremos capaz de desarrollar por completo la paciencia y la perseverancia que son frutos espirituales.
Dios soberanamente usa circunstancias difíciles y gente exasperante en nuestra vida para convertirnos en las personas que Él quiere que seamos (Ro. 8:29 ; 1 Pe1:6- 7). Si nuestro entorno de trabajo, relación matrimonial, o iglesia no resultan todo lo deseable, eso no es necesariamente malo, quizás Dios está perfeccionándonos para que dependamos más de Él y de Su gracia.
Quizá Labán nunca quiso verdaderamente a su yerno, pero lo tenía junto a él porque sabía que su propia prosperidad dependía de la presencia de Jacob. Observó que la bendición del cielo descansaba sobre Jacob y que la hacienda se incrementó de manera significativa con su gestión. Es evidente que Labán es un hombre perverso y despiadado mientras que Jacob, a pesar de su debilidad moral, es un hombre de profunda fe en Dios.

Te bendeciré y serás de bendición
Los dos hombres están de acuerdo en un hecho extraordinario: Dios ha bendecido a un hombre malo, porque tiene a un buen hombre trabajando para él (12:3; 39:2-6). Este concepto aparece varias veces en la Biblia. Lo vemos cuando Dios prometió salvar a Sodoma y Gomorra si diez hombres justos vivieran en la ciudad (Gn. 18:16-33).
Lo vemos cuando Dios prospera a Potifar porque José es parte de su familia (Gn. 39:1-6). Incluso 1ª Co. 7:12-14 contiene una fascinante discusión del problema de los matrimonios mixtos, donde uno de los cónyuges es creyente y el otro no lo es. En tal caso, el cónyuge no creyente y todos los niños que pueden estar implicados son "santificados" por el compañero creyente.
Esto significa que el no creyente ha sido bendecido a causa del creyente. El no creyente experimenta la protección y provisión de Dios porque él o ella está unido a la pareja creyente. El mismo pensamiento también está detrás de la alusión de Jesús a los creyentes como "la sal de la tierra" y "luz del mundo" ( Mt. 5:13-16 ). Sal purifica, conserva, y retarda el proceso de descomposición, mientras que la luz ilumina, disipa la oscuridad, y descubre la realidad.
Si usted es un creyente, su matrimonio es diferente (y mejor) porque usted está allí.
Si usted es un creyente, su lugar de trabajo es diferente (y mejor) porque usted está allí.
Si usted es un creyente, su escuela es diferente (y mejor) porque usted está allí.
Si usted es un creyente, su familia es diferente (y mejor) porque usted está allí.
Como creyentes, debemos ser una bendición donde quiera que vayamos y hagamos lo que hagamos ¿Es tu entorno un lugar mejor porque tú estás en él?

El trato
Al parecer ambos realizan un trato que parece favorecer a Labán ya que las cabras en el Medio Oriente son generalmente de color negro o marrón oscuro y las ovejas eran casi siempre de color blanco. Tras el trato Labán se asegura de que Jacob no le pueda engañar al quitarle definitivamente el cuidado de los animales cuyo pelaje era raro de verse (moteados o rayados u ovejas negras). Sin embargo, al hacerlo, también le da a Dios la oportunidad perfecta para brillar en una situación imposible.

La prosperidad 30:37-43
Puede llamar la atención alguna de las técnicas que utilizó Jacob para sacar ventaja de las futuras crías.
Colocó palos rayados (o veteados) frente a los animales pues se creía generalmente que mediante la colocación de tales "ayudas visuales" mientras los animales estaban apareando, era posible influir en la aparición de esos caracteres en los futuros hijos. Pero Jacob finalmente tuvo que admitir que su éxito no se debió a su brillantez como ingeniero genético, sino simplemente debido a la bondad de Dios en su vida (Gn. 32:10) Como a menudo le gusta hacer, Dios usó medios aparentemente simples para llevar a cabo Sus propósitos soberanos. No había nada mágico en los palos rayados. Jacob actuó en fe haciendo lo que Dios le dijo que hiciera, no importa lo absurdo que pareciera a la mente natural (31:9-13).

La decisión de Jacob 31:1-16
Dos cambios importantes han ocurrido desde que Jacob llegó a Padan-aram y la conjunción de estos precipitó una crisis familiar. En primer lugar, Jacob, quien llegó sin un centavo (Gn 32:10), se había convertido en próspero, y a costa de Labán. En segundo lugar, cuando Jacob llegó no hubo ninguna mención acerca de hijos varones de Labán, pero ahora él tiene hijos propios. Es fácil imaginar que esos hijos vieron con recelo a Jacob quién no sólo compartiría la herencia, sino que a causa del trato estaba quedándose con lo mejor del ganado. Ellos se encargarán de cargar a Labán con mas recelo y envidia.
Además de esto, Dios había hablado con Jacob confirmando su bendición y la indicación de su regreso a la tierra prometida (Gn. 10-13). Jacob entonces informó el contenido del sueño que tuvo a sus esposas,confirmó además la justicia de sus acciones y la convicción de su regreso a su tierra natal. Las hermanas no discuten y asienten con su esposo ya que, a través de las circunstancias habían confirmado que su padre solamente las había utilizado como cebo para mantener a Jacob cerca.

Conclusión
• Los paralelismos entre la estancia de Jacob en Padan-aram y la esclavitud de Israel en Egipto deben haber sido evidente para la nación cuando leyó este relato de la pluma de Moisés. El pecado de Jacob necesitaba esta salida como el viaje de José, más adelante, fue el resultado de muchos pecados. Jacob fue a Padan-aram como un hombre pobre, pero se fue con una gran familia y riqueza.
José fue enviado a Egipto como un esclavo, pero cuando la nación surgió en el éxodo, ya eran muchos y tenían una riqueza considerable. Al igual que Labán fue juzgado por Dios trasladando su riqueza a Jacob, Egipto fue juzgado y su riqueza fue llevada por los israelitas en el éxodo. Jacob no fue bendecido por Dios a causa de su piedad, sino debido a la gracia de Dios. Así también, los israelitas tenían que entender que sus bendiciones eran un regalo de Dios, aparte de las obras manchadas por el pecado de sus propias manos. Dios trata con su pueblo en la gracia.
• Hay dos formas de enfocar nuestra vida como creyentes: con una fe superficial que le obligue a Diosa tomar control de nuestra vida; o con una fe profunda, por la que permitimos a Dios tomar el control absoluto de nuestra vida. Todos los días nos enfrentamos a una decisión: la de disfrutar de la paz de Dios, la alegría y el contentamiento o experimentar ansiedad, ira y desilusión.

Para reflexión
1. ¿En qué actitudes de Jacob ves manifiesta su fe? ¿En qué otras se observa inmadurez en cuanto al cuidado especial de Dios sobre él? ¿Te identificas con estas actitudes?
2. ¿Por qué crees que Dios trabaja en la vida de Jacob si ya le había destinado al patriarcado de Israel antes de nacer? Lee 1ª Co 10:13; Salmo 138:8, 2ª Co 5:15 ¿Qué debía aprender todavía Jacob? ¿Por qué Dios todavía debe trabajar en nuestra vida?
3. ¿Tenemos que enfrentar personas parecidas a Labán en nuestras vidas? ¿En qué medida nos consideramos sal y luz en nuestros medios de trabajo e influencia?
4. ¿Por qué prosperó Jacob: por su astucia o por la bondad de Dios? ¿Es la prosperidad material de Jacob signo de madurez espiritual? Explica tu respuesta.
5. ¿Qué frutos espirituales debían todavía aparecer en la vida de Jacob? Menciona algunos.La historia de la vida familiar de Jacob deja mucho que desear. De hecho, el pasaje se lee como una novela moderna: la rivalidad entre dos hermanas y sus criadas por el amor de Jacob lleva a éste de tienda en tienda y de habitación en habitación.